Uno de los muebles más difíciles de encontrar puede ser un mueble de entrada ya que las medidas tan pequeña hacen difícil encontrarlo.
Por esta razón decidí aventurarme a crear el mío propio. Para crearlo me inspire en una norma del diseño creativo, «menos es más». Preferí simplificar para que fuera practico y funcional.
Aquí tenéis todo lo necesario:
- Un palet, preferiblemente nuevo.
- Martillo
- Alicates
- Cola de carpintero
- Sierra de calar
- Clavos
- Una traviesa para la barra superior (comprada en Leroy M.)
- La forma de hacerlo es bastante sencillo, cortar con la sierra de calar las baldas sobrantes a nuestra elección.
- Con las maderas sobrantes de cortar las baldas tendremos los estantes horizontales.
- Clavamos y pegamos todas estas baldas.
- En la parte superior debemos clavar 3 o 4 puntillas por la mitad, cortar previamente las cabezas de los clavos para tener punta por ambos lados, clavar la traviesa al palet con las puntillas clavadas y unir el mueble.
- Por último solo queda pintar o barnizarlo.
Este mueble tiene barra arriba, balda superior para poner adornos o algún libro y balda inferior para poner los zapatos.
Un mueble que puede hacerse en un par de horas sin muchos conocimientos y el resultado es bastante bonito. Además es bastante complicado encontrar muebles de entrada pequeños y prácticos por lo que esta opción la recomiendo enormemente.